miércoles, mayo 24, 2006

Ensalada tibia

Teníamos una bolsa de ensalada abierta unos días e iba siendo hora de terminarla. Por cierto ¿alquien compra todavía las lechugas enteras? Supongo que sí, que aún queda gente que no consume los productos en monodosis. Que sí, es muy cómodo pero a mí todo tan preparado y envasado me hace sentír que me tratan como un tonto. Aunque soy el primero en llevármelo a casa. Soy tonto y cómodo.

Bueno, que preparé una ensalada con lo quedaba de la bolsa. A saber, lechuga, zanahoria rallada y col. Encima puse unas virutas de queso. Salteé un par de lonchas de jamón serrano (troceadas a mano, que quedan más bonitas que cortadas con las tijeras) y las puse sobre el queso (curado, con mucho sabor) para que se fuese atemperando. Para terminar, unas nueces troceadas, un toque de sésamo y un buen chorreón de aceite de oliva.

Para acompañar me hice un bocadillo (me encantan los bocadillos) de jamón salteado y nueces con el pan bañado en aceite. ¡Qué bueno! Qué bien cenamos anoche y después, a ver House.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Perdona, qué aceite usas? Un buen aceite de oliva en una ensalda me parece fundamental, yo ahora uso el de http://www.reservadebaena.com pero me gustaría que me recomendases alguno. Gracias!

Anónimo dijo...

A mi me gusta comprar los paquetes que tienen distintas hojas, con distintas formas, colores y sabores. No soy muy fan de la lechuga y variar las hojas hace que me aburra menos, vamos que hace que la lechuga sea más interesante. Comprar un paquete de hojas variadas es mucho más práctico teniendo en cuenta que no consumo tanta hierba.